Porqué sigue siendo importante la celebración del Día de la Mujer
Conseguir una igualdad real en la vida cotidiana entre hombres y mujeres debería ser una finalidad a la que aspiremos llegar como sociedad. Cierto es que las normativas existentes en la actualidad pretenden ser el marco de referencia para luchar ante la discriminación de las mujeres en todos los ámbitos de la vida cotidiana
Conseguir una igualdad real en la vida cotidiana entre hombres y mujeres debería ser una finalidad a la que aspiremos llegar como sociedad. Cierto es que las normativas existentes en la actualidad pretenden ser el marco de referencia para luchar ante la discriminación de las mujeres en todos los ámbitos de la vida cotidiana.
Y aunque es cierto que se ha hecho avances muy importantes en nuestra sociedad de hecho y de derecho, beneficiándonos todos los individuos que la conformamos, no es menos cierto que es un camino que todavía no hemos terminado.
La igualdad entre mujeres y hombres en la vida cotidiana aún no es real, sobre todo en lo referente a la organización de las tareas del hogar y cuidado de la familia, representación en estamentos políticos y empresariales, a la diferencia salarial, la persistencia de la violencia de genero y el sexismo en los medios de comunicación o en el deporte, entre otros.
Por eso, con la educación en valores en los colegios, institutos, universidades, en las familias, en el deporte y en las actividades de ocio; así como de mano de una normativa que con la ayuda de la discriminación positiva, para uno u otro género según los patrones sociales que debemos alterar para llegar a la igualdad real, debemos seguir en esta lucha los hombres y mujeres, que queremos un futuro con una igualdad real, no solo para nosotros sino para las generaciones venideras, y así progresar como sociedad y como personas, y siempre siendo dueños de nuestra historia para no repetir los errores del pasado.
Y por eso, es necesario y sano, dar visibilidad a la LUCHA POR LA IGUALDAD REAL, con un día de celebración y reivindicación, el 8 de MARZO. Hagamos que este día se tiña de lila, para recordarnos que todavía nos queda camino que recorrer, y que todos los días con cada una de nuestras palabras y acciones LUCHAMOS POR LA IGUALDAD REAL ENTRE HOMBRE Y MUJERES.